lunes, 21 de mayo de 2012

No puedo poner título a esta entrada porque me pilla de improviso.  Mi mejor amigo, alguien que es como un hermano para mí, me acaba de comunicar que uno de sus hijos ha sufrido un accidente.  Ahora mismo no sé ni que escribir.  Creo que es fruto del propio nerviosismo, una especie de terapia. Por un lado la alegría de saber que "sólo" se ha roto la pelvis, ¡tras una caída de 25 metros! Por otro lado el pensamiento negativo de lo que podría haber ocurrido. Este pensamiento siempre nos intimida y ocupa toda nuestra mente, incluso con un final no muy grave. ¿Por qué será?.  Finalmente no puedo por menos que pensar en DIOS. Agradecer primeramente el final, que no puede ser más que obra del Angel de la Guarda. Ese que en nuestros primeros años de vida trabaja a destajo. Despues siempre la eterna pregunta: ¿porqué?.  Mi respuesta es siempre la misma: por algo será y ÉL lo sabe.  Bendito sea DIOS en sus Angeles y en sus Santos.

1 comentario:

  1. por algo será y ÉL lo sabe. Bendito sea DIOS en sus Angeles y en sus Santos.

    Amén.

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