miércoles, 19 de septiembre de 2012

TERRUÑO

                        Que días más extraños. Se acaban las vacaciones y las fiestas, empiezan los colegios, se acortan las tardes...se acerca el otoño. Septiembre es un mes extraño, algo tristón, melancólico. Para mayor desgracia se están produciendo una serie de acontecimientos, tanto públicos como privados, que aumentan esa sensación de tristeza y pseudodepresión.
                        En momentos así, me planteo muy seriamente retirarme al pueblo en el que están una parte de mis raíces. Es el único lugar en el que encuentro refugio, en el que me siento seguro. ¿Sabéis porqué? Porque sólo vive una persona y yo ya estoy cansado de la gente. Cansado de lo que veo. Cansado de lo que oigo. Cansado de lo que leo. Sólo me llena DIOS y una cierta soledad para poder estar con mis libros y mis rezos.
                        Vivimos un tiempo mediocre y vulgar. Pocos piensan por sí mismos y todo se mueve por consignas. Hay falta total de espíritu crítico. Se cree ciegamente lo que se lee y se oye. No hay pensadores, no hay oradores, no hay personas con "criterio" y mucho menos personas con eso que siempre se llamó "estilo". Las filas del patriotismo son el paradigma de los topicazos, del "friquismo", de la mediocridad más absoluta. Es desasosegante darse una vuelta por los diferentes grupos y partidos...¡qué perdida está la causa!
                        En la Tradición no están las cosas mucho mejor. El peligro de deseintegración, si DIOS no lo remedia, es inminente y el daño que se va a causar es de consecuencias incalculables. No hay día que no rece porque se solucione este problema. El único consuelo es que he podido conocer, gracias a DIOS, la Iglesia de siempre, la de Nuestro Señor Jesucristo, antes de que sea devorada por la Iglesia conciliar.
                       Por eso, con todo este panorama, me estoy planteando muy, pero que MUY seriamente, retirarme a vivir en contacto con la naturaleza y los animales. Poder así guardar y conservar lo que he recibido y transmitirlo a los que tenga posibilidad. Es la única manera de mantenerse al margen de toda esta basura que nos rodea. DIOS os bendiga.

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